Muchas veces señalamos el polvo como un problema meramente estético de nuestras casas, asociado a una ausencia de limpieza. Sin embargo, lo que a veces ignoramos es que el polvo puede suponer un perjuicio para nuestra salud. ¿Lo sabías?
¿Qué es exactamente el polvo?
El polvo es una sustancia volátil presente en el ambiente dentro de nuestras casas producido, en gran medida, por nosotros mismos. Está compuesto principalmente por células de la piel, tanto de personas como de animales domésticos. Según la Academia Española de Dermatología, cada persona puede desprender entre 30.000 y 40.000 células epiteliales por minuto: 28 gramos por semana. Otros materiales que pueden contener las motas de polvo son restos de tierra traída del exterior mediante el calzado, fibras textiles y hasta esporas de hongos, pasando por elementos tóxicos presentes en gran parte de los objetos con los que tratamos a diario, como los derivados del plástico.
Sustancias tóxicas presentes en el polvo
Éstas son algunas de las sustancias tóxicas que pueden estar presentes en el polvo de nuestras casas.
- Retardantes de llama. Como los químicos TDCIPP o TCEP. Usados con frecuencia en la fabricación de muebles como sofás y aparatos electrónicos para evitar que ardan con facilidad. Está probado que algunos de ellos son cancerígenos.
- Ftalatos o ésteres de ácido ftálico. Están presentes en los plásticos, usados para incrementar su flexibilidad. Los ftalatos son considerados causantes de interferir con las hormonas de nuestro cuerpo. También se ha vinculado con problemas de desarrollo y salud reproductiva.
- Compuestos perfluorados. Presentes en el teflón de algunos utensilios de cocina, prendas impermeables, productos para el cabello, productos de limpieza, etc. Son frecuentes en nuestro entorno. Son muy persistentes y actualmente se asocian a diversos tipos de cáncer.
- Plaguicidas. Transportados al interior de nuestros hogares a través del calzado o de prendas de vestir que hayan estado en contacto directo con sustancias del exterior.
Problemas de salud relacionados con la exposición al polvo
Los problemas de salud que podemos sufrir asociados al polvo son generalmente de tipo respiratorio, aunque también pueden darse problemas relacionados con los ojos. Al tratarse de partículas muy diminutas, es fácil que al respirar en un ambiente muy cargado puedan introducirse en nuestro organismo hasta alcanzar los pulmones y los bronquiolos. Nuestro cuerpo está preparado para eliminar muchas de estas sustancias a diario, pero hay otras que son más difíciles de expulsar o anular y que pueden tener, a la larga, efectos nocivos en nuestra salud.
Algunas de las enfermedades que pueden darse como consecuencia de una exposición continua a altas cantidades de polvo o verse afectadas por el mismo son la bronquitis y el asma, entre otras disfunciones pulmonares y respiratorias. Además, se hace especialmente dificultoso para personas con alergias o congestión.
La importancia de mantener limpio el entorno
Aunque en muy pequeñas cantidades, son muchas y variadas las sustancias tóxicas que puede contener el polvo de nuestras casas y, a la larga, provocar perjuicios en nuestra salud y la de los nuestros. Mantener limpio el entorno es de fundamental importancia. Se debe limpiar con frecuencia y concienzudamente, utilizando los productos más adecuados y efectivos para cada tipo de superficie.
En Aldaba Centro Especial de Empleo somos conscientes de la importancia de una buena limpieza. Por eso nuestro trabajo es siempre de la mejor calidad. Consulta aquí todos los servicios que ofrecemos y no dudes en contactarnos para cualquier tipo de consulta.